Los términos psicología y sicología son válidos, como consta en el Diccionario de la lengua española, para referirse a la ‘ciencia o estudio de la mente y de la conducta en personas o animales’.
Así, en los medios de comunicación de Cuba encontramos indistintamente ejemplos como estos, todos correctos:
- «En el año 2014 se instituyó el 13 de abril como Día Nacional de la Psicología en Cuba».
- «Algunos deportistas se han manifestado sobre los efectos sicológicos que pueden derivarse del distanciamiento físico que exige la COVID-19».
- «Es la sicología de la prepotencia, que se sigue repitiendo a lo largo de la historia».
En la última edición de la Ortografía de la lengua española (2010), se explica que, si bien el uso culto sigue prefiriendo las grafías etimológicas con ps– inicial, se admiten en todos los casos las variantes con reducción del grupo ps- a s-, que reflejan la pronunciación normal de estas palabras en español: sicología, sicosis, siquiatra, sitacismo, seudoprofeta, soriasis…
A propósito, conviene insistir en que los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de las disciplinas científicas y las diversas ramas del conocimiento deben escribirse, en general, con minúscula, tanto en su sentido propio como en los derivados: La psicología infantil es muy complicada.
De acuerdo con esta obra académica, se escribirán con mayúscula inicial únicamente en contextos académicos o curriculares, cuando designen estudios o materias regladas: Soy licenciada en Psicología.
Esta recomendación se publicó por primera vez el 13 de abril de 2021.