La grafía hectopascal es la adecuada para expresar, en meteorología, la presión atmosférica, no hectoPascal, que combina impropiamente mayúsculas y minúsculas en el interior de una misma palabra.
De acuerdo con la Real Academia Española, «los nombres de las unidades de medida forman el plural regularmente». Así, lo adecuado es 999 hectopascales, no 999 hectopascal. En cambio, su símbolo sí se mantiene invariable (999 hPa); además, se escribe sin punto y separado con espacio de la cifra que le precede.
Sin embargo, en los medios de comunicación de Cuba es frecuente encontrar ejemplos como los siguientes:
- «Su presión central descendió hasta 944 hectoPascal».
- «La presión central de este sistema ha descendido hasta 974 hectoPascal».
Conforme a lo explicado en la Ortografía académica, «las palabras que designan las unidades de medida, tanto las básicas como las derivadas, pertenezcan o no al sistema internacional de unidades, son nombres comunes que deben escribirse con minúscula inicial, con independencia de que puedan tener su origen en un nombre propio: metro, pie, yarda, julio, newton, pascal, tesla».
Así pues, en los ejemplos iniciales, lo aconsejable habría sido redactarlos como se muestra a continuación:
- «Su presión central descendió hasta 944 hectopascales».
- «La presión central de este sistema ha descendido hasta 974 hectopascales».
