Aedes aegypti, en cursiva, y con aegypti en minúscula, es la escritura adecuada del nombre científico de esta especie de mosquito causante de la transmisión del dengue, la fiebre amarilla, el zika y la chikungunya (tb. escrito chikunguña), entre otras enfermedades.
Sin embargo, en los medios de comunicación de Cuba encontramos ejemplos como los siguientes:
- «El MINSAP refuerza durante julio y agosto las acciones de control hacia el Aedes aegypti».
- «La población de mosquitos transmisores del dengue se reduce considerablemente con cada liberación de Aedes Aegypti modificado».
- «Nace el médico, biólogo y científico Carlos Juan Finlay Barrés, descubridor del mosquito Aedes aegypty como agente transmisor de la fiebre amarilla».
Tal y como consta en la Ortografía de la lengua española, denominaciones, como Aedes aegypti deben escribirse en cursiva y solo con mayúscula inicial en el primer elemento, el cual es el designativo del género, a diferencia del segundo, que se refiere a la especie.
No debe usarse Aedes simplemente para referirse al nombre científico de este mosquito. Dicho vocablo, que ha de ir en cursiva, alude al género de estos insectos, como se explica en el Diccionario de términos médicos. Por esta razón, tampoco ha de usarse como nombre común. En su lugar suele emplearse mosquito de la fiebre amarilla a pesar de que esta no es la única enfermedad que transmite.
Así, en los ejemplos iniciales lo apropiado habría sido redactar las informaciones como se muestra a continuación:
- «El MINSAP refuerza durante julio y agosto las acciones de control hacia el Aedes aegypti».
- «La población de mosquitos transmisores del dengue se reduce considerablemente con cada liberación de Aedes aegypti modificado».
- «Nace el médico, biólogo y científico Carlos Juan Finlay Barrés, descubridor del mosquito Aedes aegypti como agente transmisor de la fiebre amarilla».