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Variante no es lo mismo que cepa. Sin embargo, en los medios de comunicación es frecuente encontrar frases como «Cepa Delta predomina en Cuba», «Cepa Delta avanza en Río de Janeiro» y «Nuevas cepas del coronavirus complejizan la COVID-19 en Cuba».
La vigesimotercera edición del Diccionario de la lengua española, entre las acepciones del sustantivo cepa, documenta la siguiente: ‘grupo de organismos emparentados, como las bacterias, los hongos o los virus, cuya ascendencia común es conocida’.
Asimismo, el Diccionario de términos médicos (DTM), de la Real Academia Nacional de Medicina, de España, agrega que cepa (o estirpe) alude al ‘conjunto de organismos, como bacterias, plantas o animales, que, perteneciendo a la misma especie, presentan características o rasgos comunes y propios, determinados genéticamente, aunque sin constituir una variedad o subespecie’.
En cambio, variante se refiere a la ‘entidad que difiere o varía en alguna característica con respecto a la clase a la que pertenece’, como consta en el DTM, obra en la que también se explica que este término «puede aplicarse a enfermedades, seres vivos, rasgos fenotípicos o genotípicos, modalidades terapéuticas, etc.».
Como señala la Fundación del Español Urgente (Fundéu), «el concepto de cepaimplica un comportamiento diferente de un virus respecto del virus original. Este cambio de comportamiento debe ser significativo para que una variante se considere cepa, y esto no ha ocurrido hasta ahora en la actual pandemia».
Así, lo adecuado hubiese sido escribir «Variante delta predomina en Cuba», «Variante delta avanza en Río de Janeiro» y «Nuevas variantes del coronavirus complejizan la COVID-19 en Cuba».
Conviene recordar que «en el caso concreto del coronavirus del síndrome respiratorio agudo grave, hay dos cepas: la que provoca la enfermedad conocida como SARS o SRAG, que apareció hace dos décadas, y la que provoca la COVID-19. La primera se identifica como SARS-CoV(o SARS-CoV-1) y la segunda, es decir, la que se ha extendido actualmente, como SARS-CoV-2», tal y como nos recuerda la Fundéu.
Por último, una vez más insistimos en que los nombres de las variantes, por ser sustantivos comunes, deben escribirse con inicial minúscula, pues no hay razón lingüística para justificar en esos casos el uso de la mayúscula ni tampoco el empleo de la cursiva. Así, lo apropiado sería alfa (la variante detectada en el Reino Unido), beta (en Sudáfrica), gamma(en Brasil), delta y delta plus (en la India) y lamba (en Perú).
*Tomado de la revista Juventud Técnica.